El juicio es algo relativo. No juzgas a un niño por hacer algo mal cuando sabes que
no conocen una forma mejor de hacerlo. Juzgas a alguien que crees que debe saber la
forma de hacer las cosas. Juzgas a los demás y a ti mismo basándote en la
relatividad de lo que tú percibes que es justo. ¿Qué es lo justo en realidad?
Hoy, cuando el impulso de juzgar sea fuerte, guarda el medidor y ve hacia adentro en
lugar de ver hacia afuera.
(EXTRAIDO DE: LA CONCIENCIA DE KABBALAH)